Las aves volaban por el
cielo, el sol saturaba con su color amarillo y el viento soplaba fuertemente
los rostros de los niños jugando en el patio de una casa, mientras Estefany
miraba el cielo y suspiraba mientras su deseo por saltar del 3 piso de su casa
abandonaba su mente, su rostro reflejaba nostalgia que empezaba a tornarse de
alegría.
Estefany era una niña de 8
años que siempre solía soñar con tener unas alas y volar para alcanzar y tocar
las nubes esponjosas que habitaban en el firmamento y por las noches ella
quería saber que forma o que componían realmente
a las estrellas, alcanzar el cielo para ella, seria lograr su meta de descubrir
la verdad de los astros. Era una niña muy reflexiva debido a que amaba los libros y leía
demasiado sobre los astros, por que su
primer regalo de su papá fue un libro
enorme de “Atlas del Mundo Cósmico” quien sabe de que autor, lo que importaba
era el contenido, sus ilustraciones, sus cartografías que te atrapaban en sus constelaciones y
galaxias.
Y Estefany ahí pensando a
orillas de techo de su tercer piso de su casa, parecían 20 pisos para ese
pequeño cuerpo, ella no pensaba en nada más que en la frase de aquel poeta que
dijo “por mirar tanto el cielo te saldrán alas”. Ella soñaba y su deseo fue
grande que no se fijo en la distancia
que había entre su cuerpo y el suelo. Sus pies no templaban de miedo porque
ella no miraba si quiera el vacío que había entre ellos dos, solo sus ojos se
enfocaban al infinito, a la eternidad. Su corazón dejo de oír los ruidos del
miedo, su mente dejo de pensar, su pecho latía lentamente, ella ya no estaba
parada ahí, estaba en otro lugar.
Los padres de Estefany
llegaron a casa y al ver que encima del techo estaba su menor hija a punto de
suicidarse se enloquecieron y a la vez se quedaron atónitos sin saber que
hacer. Tu papa tuvo una reacción tardía, movió la cabeza con dureza como
queriendo volver en si y corrió por las escaleras,
mientras su mamá lloraba y le decía a su hija que bajase, suplicándole. Pero
Estefany no oía a nadie, no los miraba, no existía nadie bajo sus pies.
Su cuerpo tomo impulso, su
miraba seguía mirando al cielo y se dejo caer sencillamente. Su madre pudo ver
como caía lentamente como su cuerpo se desplomaba como una roca y su padre corriendo
no llego a alcanzar atrapar a su hija, a las justas rozo sus pies y sus ojos de
desesperación y frustración solo vieron caer a ese pequeño cuerpo.
Estefany ese díavoló y nunca más
se supo de ella, nadie recuerda que sucedió realmente, sus padres no sabían
porque se hallaban ahí parados llorando mirando al cielo. Su hija había muerto
hace medio año y su fotografía estaba empolvado en un armario olvidado, en un armario
para que no cause dolor el recuerdo, y
ese día era el día que Estefany los dejó y voló al cielo que tanto añoraba
llegar.
“No vivas en el pasado, pero
tampoco huyas de el, debes entender el pasado, ese acontecimiento que te ha
sucedido a ti y nada mas que a ti, para que en el presente puedas vivir
amándola en el presente y entiendas que no has pedido a nadie, esa persona vive
en ti, y siempre podrás amarla y encontrarla en ti. Porque nada se ha ido de
ti, solo tu has volteado la dirección de tu mirada”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu pincelada