La escafandra

En mi escafandra alguna vez estuve
como una mariposa atrapada en su pequeña trampa
como una tortuga andando con su propia casa
estuve atrapado en mi mismo!
tenia la piel blanca de yeso
mi cuello llevaba un collar de emergencia
que me daba elegancia y arrogancia
encerrado en mi escafandra parecía una rata
en la trampa.
Quiero ver mas allá de estas ventanas
tocar las sabanas y cambiarme de lugar
el cuerpo me pesa como si me aplastaran con la almohada
y no es mi cuerpo lo que pesa, lo olvidaba
sino mi piel de yeso,
casi un robot sin movimiento
un maniquí en la exposición del centro
mi miedo a los ángeles con agujas no cambiara mañana
llegaran y me despertaran con su cruda sonrisa
no dolerá dirán como siempre
y me mentirán de nuevo
esos ángeles con bata, cuanto les temo
odio estar atrapado en esta armadura
que me convierte en soldado en cementerio
viene el verano, y se escapa el invierno
y quiero caminar sobre mis propios pies
aunque cojee como un abuelo
dejar las ruedas de esta cama de oxido añejo
cambian los colores de las paredes al parpadeo
ando por las madrugadas despierto
y de día duermo tratando de despertarme de este mal sueño
pero todos los días despierto en este mismo cuerpo
atrapado en la escafandra del silencio.

Lima, 25 de noviembre del 2000.
recuerdos de un enfermo.